Distribuidores de máquinas de coser Pfaff cerca de mí

Las máquinas de coser Pfaff tienen una reputación tan grande y siguen siendo tan populares hoy en día que encontrar un distribuidor Pfaff local es bastante fácil. ¡Puede acudir a estos distribuidores para encontrar técnicos certificados para reparar una máquina que aún está en garantía o comprar una nueva máquina de coser Pfaff!

Simplemente visite el sitio web de Pfaff aquí, escriba su código postal y consulte la lista de distribuidores cerca de usted.

Sin embargo, como advertencia, debe encontrar una persona de reparación certificada por Pfaff si tiene una garantía. Si no tiene garantía para su máquina, tiene un poco más de libertad para simplemente visitar su taller de reparación de costura local.

¿Qué son las máquinas de coser Pfaff?

Las máquinas de coser Pfaff han mantenido una excelente reputación desde finales del siglo XIX hasta la actualidad. Las máquinas Pfaff modernas a menudo vienen con tecnología muy avanzada, incluido el software de bordado o acolchado. ¡Muchas alcantarillas todavía valoran las máquinas Pfaff antiguas construidas con ingeniería precisa que todavía funcionan hoy!

Georg Pfaff fundó esta legendaria empresa alemana de máquinas de coser en 1862. ¡Construyó la empresa de fabricación con tal habilidad que pasó de vender seis máquinas de coser en su primer año a vender 1000 en su décimo año!

Pfaff siguió siendo una empresa familiar durante casi un siglo. Sin embargo, la década de 1960 vio el final de esta era, cuando la empresa finalmente se hizo pública. En años posteriores, la empresa propietaria de Singer también compró Pfaff.

Hoy en día, la marca Pfaff todavía existe. Pero Pfaff como empresa no lo hace. Es propiedad de SVP Worldwide.

La buena noticia es que todavía puede comprar máquinas de coser Pfaff nuevas. ¡Al menos, si puede pagarlos! Estas máquinas de alta gama a menudo vienen con etiquetas de precio muy altas.

Muchas alcantarillas afirman que Pfaff fabrica las mejores máquinas de coser del mundo. En cualquier caso, ciertamente ofrecen una dura competencia a otras marcas de máquinas de coser de alta gama como Bernina y Janome.

¿Cuánto cuesta reparar una máquina de coser Pfaff?

La mayoría de los talleres de reparación certificados por Pfaff cobrarán un promedio de al menos $ 100 solo por examinar su máquina de coser. Las máquinas modernas de Pfaff tienen computadoras sofisticadas y piezas complejas, por lo que puede comprender por qué los técnicos capacitados cobran mucho por repararlas.

Además de eso, normalmente tendrá que pagar usted mismo las piezas de repuesto necesarias. Además, algunos técnicos cobran por el tipo de reparación, pero muchos cobran por hora, al igual que un mecánico que trabaja en su automóvil.

Alternativamente, puede aprender lo suficiente sobre su Pfaff para realizar la mayoría de las reparaciones usted mismo. Aún tendrá que comprar las piezas de repuesto necesarias. También es posible que desee pasar una cantidad significativa de tiempo investigando o incluso tomando clases en línea antes de intentar esto.

¿Vale la pena gastar todo este dinero en reparar su Pfaff? ¡Al menos nueve de cada diez veces, sí! Las máquinas Pfaff cuestan mucho y no desea desechar esa costosa máquina debido a una tarifa de reparación de doscientos dólares.

Sin embargo, existen algunas excepciones a esta regla. Las máquinas mecánicas Pfaff funcionarán para siempre. ¡Como, literalmente, durante décadas y décadas! Casi siempre vale la pena realizar las reparaciones necesarias en un modelo Pfaff mecánico o antiguo.

Las máquinas computarizadas pueden tener o no una vida útil prolongada. A medida que la tecnología se desarrolla tan rápidamente, algunos modelos computarizados se extinguen rápidamente, como las antiguas máquinas Pfaff que funcionaban con un disquete. ¡Probablemente no desee pagar las reparaciones de ese modelo en particular!

Solución de problemas de la máquina de coser Pfaff: 8 problemas comunes

Por supuesto, como cualquier alcantarillado sabe, todas las máquinas de coser ocasionalmente necesitarán solución de problemas, incluso modelos Pfaff elegantes y de alta calidad. Sin embargo, si sabe qué problemas comunes puede esperar, puede prepararse para lidiar con los problemas y seguir adelante.

Sin embargo, consulte estas dos breves palabras de advertencia antes de sumergirse.

Primero, si posee una máquina de coser Pfaff más nueva, probablemente tenga garantía. Esto significa que Pfaff se compromete a reparar la máquina y suministrar piezas de repuesto en determinadas condiciones. Debe leer la letra pequeña de la garantía y averiguar qué puede hacer usted mismo y qué tipo de problemas debe llevar a un técnico certificado para evitar anular la garantía.

En segundo lugar, lea el manual de su máquina de coser antes de intentar una reparación. Su manual del propietario le dará consejos específicos para el modelo de Pfaff en particular que posee. Cada modelo tiene sus idiosincrasias, ¡así que asegúrese de seguir las instrucciones de su manual!

1. La máquina de coser no se enciende

1. Desenchufe el enchufe de la pared e intente insertarlo en otro tomacorriente. Es posible que se haya fundido un fusible o que el enchufe se haya soltado.
2. Verifique la conexión donde el cable se conecta a la máquina de coser. Esto a menudo se afloja, especialmente si recientemente ha usado su máquina para coser trabajos pesados.
3. Mire su máquina con cuidado. ¿Se encendió, pero la luz no se encendió? Esto podría significar simplemente que necesita reemplazar la bombilla pequeña en la luz de costura del techo.
4. Si su máquina se enciende pero no cose ni hace nada, es posible que deba revisar el pedal. Primero, desenchufe el cable del pedal y vuelva a conectarlo a la máquina. Si eso falla, dé la vuelta al pedal y busque cables sueltos en su interior.

2. Aguja atascada o máquina de coser atascada

Uno de los problemas más comunes con los que se encuentra al coser es una aguja atascada o una máquina de coser atascada. Este problema puede tener varias causas, por lo que es posible que desee seguir esta práctica lista de verificación hasta llegar a la solución.